Victor Trevino
(Nina Minimaximova)
Treviño, fundador y director artístico de Les Ballets Grandiva y actual director de Les Ballets Eloelle, Men in Tutus y Men in Pink Tights, ha creado varios trabajos para la compañía, incluidos Romeo y Julieta, Le Petite Nutcracker Suite, Spartacus, Swan. Lake Act II, Bolero, Near the Middle Somewhat Below, Love Wrongs, Peridot, Minkus Gala, Pocahontas Pas, Dracula y The Changing Room, y ha realizado numerosos dúos y solos clásicos. Más allá de Les Ballets Grandiva, sus creaciones incluyen Las aventuras de Caperucita Roja, Peter y el lobo, Una guía para jóvenes para la orquesta y El sueño de una noche de verano. El Sr. Treviño también fue miembro original del Ballet Florida con Marie Hale y bailó con Les Ballets Trockadero de Monte Carlo durante diez años. Actualmente es el director artístico del New England Ballet y es el coordinador de interpretación y enlace de la Palm Beach Atlantic University, además de profesor adjunto.
La extensa carrera de Victor como bailarina incluye a la mayoría de las grandes protagonistas femeninas como Odette, Odile, Giselle, Kitri, Aurora, Sugar Plum Fairy, Juliet y Carmen. Treviño todavía disfruta de las risas de una audiencia en vivo y está emocionado de poder contribuir a la comunidad de baile.
En su tercer divorcio, el brindis de París, San Petesburgo, Tokio y Long Island. Minimaximova reinó suprema en los escenarios de los grandes teatros del mundo hasta su retiro forzado por detractores celosos y un público con gusto.
Sin embargo, el aburrimiento y la insaciable sed de fama, aplausos, glamour y un cheque de pago, la incitaron a meterse una vez más en zapatos ajustados de satén rosa y desafiar a los críticos que afirman que el talento es una parte integral del arte. La Sra. Minimaximova ahora ocupa alegremente el turbante, roles sentados que se hicieron famosos por bailarinas de cierta edad e ingenio que ha encontrado una nueva audiencia adoradora, que ella espera, con suficiente acecho para hacer de ella.
El vertiginoso champán del éxito no se le ha subido a la cabeza a mademoiselle, ya que sigue siendo una artista intransigente, una figura activa de la sociedad, una mentora y operadora de líneas telefónicas psíquicas.